*El Nuevo Acceso a la capital se satura de vehículos
*Hay larga fila de mujeres que intentan ingresar a la Deportiva
Pésima organización para la entrega de la tarjeta.
Una larga fila de vehículos en el Nuevo Acceso a la ciudad de Guanajuato provocó un caos hoy lunes por la mañana a causa de la entrega de la Tarjeta Rosa con la cual las mujeres recibirán un apoyo de mil pesos por el bimestre.
Hay que señalar que no solamente hay mujeres formadas de esta ciudad, sino que vinieron de otros municipios.
Esta movilización provocó una fuerte afectación al transporte público de pasajeros, a vehículos particulares y toda unidad que por fuerza tuvo que ingresar a la ciudad de Guanajuato.
Este programa estatal y que “aterrizó” al municipio de Guanajuato, es una pésima copia de los programas sociales de la llamada “Cuarta Transformación” del gobierno federal, que, de igual forma, tienen la finalidad de comprar voluntades para próximos procesos electorales.
La presencia de cientos de personas que van por su Tarjeta Rosa sólo pone en evidencia las condiciones lacerantes de pobreza y marginación en que está hundida nuestra entidad.
Mientras la ciudad de Guanajuato, y sus habitantes sufren y están temerosos por la inseguridad y la violencia que fue rebasada a las autoridades municipales, cientos de mujeres acudieron hoy a recibir su mísero apoyo económico.
En las redes sociales, abundaron las críticas por el congestionamiento vial generado por la movilización de las mujeres que acudieron a la deportiva Juan José Torres Landa a recibir su gran apoyo.
Hay que recordar que “el gobierno de la gente”, se comprometió a entregar las tarjetas rosas, pero desafortunadamente hay una total desorganización.
Una multitud de mujeres se dieron cita en las inmediaciones de la Unidad Deportiva “Juan José Torres Landa” de esta capital, la mayoría de ellas con supuesta cita, pero al llegar se encontraron con el caos y el desorden pues no les han respetado la hora en que fueron convocadas.
La gente tendrá que esperar horas bajo los rayos del sol y sin que haya baños públicos cerca.
Mientras cientos de mujeres buscan obtener su tarjeta rosa de mil pesos, los altos burócratas del gobierno del estado, de los mejores pagados del país, se despachan con la cuchara sopera, como dijera el entonces diputado priísta, Luis Gerardo Gutiérrez Chico, ya que los servidores públicos obtienen salarios millonarios.