50 FIC

Dr. Luis Miguel Rionda

En esta semana dio inicio la edición número 50 del Festival Internacional Cervantino (FIC) en la ciudad de Guanajuato, patrimonio cultural de la humanidad. Suma ya medio centenar de ocasiones en las que se han dado cita varios miles de artistas escénicos, musicales, gráficos y de las demás artes de la sensibilidad humana. En el mundo hay muy pocos esfuerzos culturales de esta dimensión que hayan acumulado tal cantidad de años de realizarse. El FIC ha mantenido su continuidad con sólo un par de interrupciones: una en 1973 por cuestiones presupuestales, y en 1985 por el sismo del 19 de septiembre. Esta última hubiera sido la edición 13; pero se saltó el número fatídico por pura superstición.

Me siento muy orgulloso de haber sido convocado a colaborar en la factura de un libro conmemorativo por esta ocasión tan especial. Se trata del magnífico volumen “50 FIC”, que se presentó ayer en el Palacio de los Poderes, sede del Instituto Estatal de la Cultura (IEC). Agradezco mucho la invitación a mi querida amiga y compañera de aventuras festivaleras Adriana Camarena de Obeso, directora general del IEC, y a Mauricio Vázquez González, director editorial de ese instituto.

El libro es de hermosa factura. Pero su contenido es lo mejor. Consta de cuatro secciones: la primera consiste en las necesarias presentaciones de las autoridades: el gobernador Diego Sinhue Rodríguez; el secretario estatal de turismo Juan José Álvarez; la secretaria federal de cultura Alejandra Frausto; la directora general del IEC Adriana Camarena; la directora general del FIC Mariana Aymerich; el presidente municipal Alejandro Navarro, y el rector general de la UG Luis Felipe Guerrero.

En la segunda parte “Historia y contexto del Festival Internacional Cervantino”, colaboramos Eduardo Vidaurri Aréchiga (Los guanajuatenses, las artes y el FIC); Jorge Olmos Fuentes (Descentralización: búsqueda tenaz), y este escribidor (Guanajuato y el FIC: crónica de un advenimiento cultural). En la tercera sección “FIC Ideas y estética” participan Carmen Beatriz López Portillo Romano (Un Festival abierto al futuro); Sergio Vela (Contextos para una estética); Ramiro Osorio Fonseca (Génesis de un festival para los nuevos tiempos), y Marcela Diez-Martínez Franco (La función social del Festival Internacional Cervantino).

En la cuarta sección “El FIC en las artes”, participan Octavio Sosa Manterola (La ópera en Guanajuato); Estela Leñero Franco (El teatro, un abanico de posibilidades); Juan Arturo Brennan (Murmullos y estruendos en el FIC: un Festival resonante); Rosario Manzanos González (Cincuenta años de danza); Gloria Maldonado Ansó (Ajustando velas: larga vida a las artes en Guanajuato), y Carlos Ulises Mata Lucio (Pensamiento y literatura en el FIC).

Suman 320 páginas de gran valor estético, histórico, social y artístico, adornadas con una profusión de imágenes de todas las ediciones, de sorprendente vitalidad y hermosura. Se incluye una lista de todos, sí, todos los artistas que han participado a lo largo del medio siglo. También un par de páginas que rescatan los 50 carteles que han anunciado cada festival. Culmina con un directorio cronológico con las autoridades que se han involucrado.

Este libro-objeto fue posible gracias a la colaboración de la Secretaría de Turismo estatal y el IEC. Las imágenes se seleccionaron del enorme acervo histórico del FIC y de la fototeca del periódico Milenio León. En fin, se trata de un gran aporte para conmemorar un aniversario tan trascendente, que sirve de ocasión para una reflexión no sólo sobre el rico camino andado, sino también sobre el futuro del encuentro cultural más importante de América Latina.

Además, hay que valorar que el FIC ha sido un experimento exitoso de descentralización de la vida cultural en un país fuertemente centralizado.

Por Juan Ma J