*Pronunciamiento del Consejo Interreligioso de esta entidad
En un pronunciamiento hecho por el Consejo Interreligioso del Estado de Guanajuato, integrado por diversas comunidades de fe, exhortaron al mandatario estatal Diego Rodríguez Vallejo que vete la Ley para la Diversidad Sexual y de Género de la Entidad que crea la Unidad responsable para la ejecución, promoción e impulso de acciones en esta materia que quedará adscrita a la Secretaría de Gobierno.
Y es que, en su posicionamiento, mencionan que la ley votada a favor en el Congreso del Estado de Guanajuato no fue tomada en cuenta al sector religioso.
“Creemos que esta ley atenta contra la niñez, y contribuye a discriminar a la mujer. Instamos buscar soluciones que respeten la diversidad de opiniones y creencias, promoviendo el diálogo y el respeto mutuo”.
De igual forma señalaron “reafirmamos nuestro compromiso de orar y trabajar por la paz, la justicia y el respeto mutuo en nuestra sociedad, buscando siempre el bienestar y la dignidad de todos los seres humanos”.
En el pronunciamiento, de entrada recuerda que la ley suscrita inicialmente por la entonces diputada local del Partido Verde, y actual asesora de esta Bancada en el Congreso Local, Vanessa Sánchez Cordero, y retomada por la legisladora Martha Lourdes Ortega Roque y por su compañero Gerardo Fernández González, para institucional, a través de la Ley para la Diversidad Sexual y de Género para el Estado de Guanajuato y sus Municipios, fue aprobada primero por la Comisión de Derechos Humanos y Atención a Grupos Vulnerables que preside el morenista, David Martínez Mendizábal y que la conforman también diputadas panistas y un priísta.
Posteriormente el dictamen fue subido al pleno del Congreso Local de Guanajuato donde fue aprobado por unanimidad de votos.
El documento compartido refiere “basándonos en principios bíblicos y en nuestra propia convicción religiosa, creemos en la dignidad y el valor intrínseco de cada ser humano, creado a imagen y semejanza de Dios. Reconocemos la importancia de respetar y proteger los derechos humanos de todas las personas, incluidas aquellas que se identifican como parte de la comunidad trans”.
Termina el escrito “sin embargo, también creemos en la enseñanza bíblica sobre sexualidad humana, que sostiene que Dios creó al ser humano como hombre y mujer, y que el matrimonio es la unión entre un hombre y una mujer. Creemos que cada individuo tiene el derecho a vivir de acuerdo con sus convicciones y creencias, pero también reconocemos la necesidad de proteger los valores y principios que consideramos fundamentales para nuestra sociedad”.