This image shows the locations of some of the telescopes making up the EHT, as well as the long baselines between the telescopes.

*Ubicado en el centro de la Vía Láctea

*No representa riesgo para la tierra

Importante contribución

El Agujero Negro Sagitario A* (Sgr A*) se encuentra a 27 mil años luz de nuestro sistema solar, por lo que el astrofísico Jorge Alejandro Preciado López,  en su opinión no representa un riesgo para la vida en la Tierra. 

“Es algo que no nos debe de preocupar, estamos a una distancia muy considerable, de tal manera que, a pesar de la gran actividad en el centro de nuestra galaxia, los efectos no son apreciables para nosotros”. 

Formado en la Universidad de Guanajuato (UG), el astrofísico Jorge Alejandro Preciado López continúa trabajando para trascender en el ámbito científico.

En el año 2017 se integró a la Colaboración Internacional del Telescopio del Horizonte de Eventos (Event Horizon Telescope, o EHT por sus siglas en inglés), organización que el pasado 12 de mayo dio a conocer entre sus resultados innovadores la primera imagen de Sagitario A* (Sgr A*), el agujero negro ubicado en el centro de la Vía Láctea. 

El gusto por la Física para el guanajuatense fue fomentado desde su educación en la Preparatoria Oficial (ahora ENMS) de Salamanca, donde comenzó a participar en concursos de Física convirtiéndose en campeón nacional en la Olimpiada Nacional de Física en el año 2001, para después representar a México y convertirse en ganador de una presea de bronce en la VII Olimpiada Iberoamericana de Física en el año 2002. Fue de esta manera que descubrió su talento por la ingeniería y la física, lo que lo llevó a estudiar la carrera de Ingeniería Eléctrica en la FIMEE (ahora DICIS), para posteriormente desarrollar sus estudios de posgrado en Física en la División de Ciencias e Ingenierías del Campus León. 

“Siempre fui un ingeniero muy teórico, todo el tiempo trabajando en los modelos matemáticos detrás de todos los experimentos que realizábamos. Siempre fue mi meta convertirme en investigador y eso me ayudó para posteriormente realizar mis estudios de posgrado en el entonces Instituto de Física de la UG”, destaca.  

Dicha trayectoria le llevó a trabajar como investigador en el Perimeter Institute for Theoretical Physics, uno de los institutos de mayor renombre en el campo de la física teórica en el mundo actual, ubicado en Waterloo, Ontario, Canadá, y en el cual encontró la oportunidad de sumarse al equipo del EHT.   

Asimismo, recuerda que en toda esta travesía ha sido clave el impulso de profesores de la Universidad de Guanajuato como el ingeniero Bernardo Agustín Pérez Núñez y el Dr. Octavio Obregón, reconocido científico a nivel internacional, así como de la propia Institución, la cual gestiona lazos de colaboración a través convenios nacionales e internacionales que permiten abrir este tipo de oportunidades a sus estudiantes.  

“Soy un orgulloso egresado de la Universidad de Guanajuato. Sin duda ha habido muchas personas a lo largo de toda mi formación que hicieron un gran esfuerzo para apoyarme e impulsarme a tener este nivel de proyección”.   

Colaboración Internacional del Telescopio del Horizonte de Eventos (EHT) 

Astrofísico Alejandro Preciado

En cuanto a los resultados anunciados por el EHT, el investigador mexicano recalca que este logro representa el esfuerzo de una colaboración multidisciplinaria e internacional, en la cual se requirió del trabajo de varios equipos para poder sincronizar los ocho telescopios que participaron en las observaciones realizadas en Abril de 2017, incluyendo el Gran Telescopio Milimétrico Alfonso Serrano ubicado en la cima del volcán Sierra Negra en Puebla.   

De igual manera se requirió del trabajo de investigación realizado por personal experto en diversas áreas del conocimiento como: la astrofísica, la radioastronomía, la estadística, el modelado, el desarrollo de algoritmos para obtención de imágenes, y demás disciplinas que se conjuntaron.  

Explica que: “Yo me uní a la colaboración a finales del año 2016, meses antes de que se realizaran las observaciones que dieron lugar a las imágenes que se han publicado de Sagitario A* y de M87*” por lo que tuvo la fortuna de incorporarse en el momento en que se comenzó con el desarrollo de los modelos y la maquinaria de software necesaria para comparar las predicciones de dichos modelos contra las observaciones realizadas por los telescopios. 

“Nos sentamos a buscar de qué manera podíamos traer todos esos modelos, generar simulaciones y entonces comparar sus predicciones contra las observaciones”, detalla que en el área de modelado “lo que uno quiere saber es cual es el mejor modelo que describe los datos recopilados. Y una vez que se encuentra el modelo más probable se pueden inferir parámetros geométricos y físicos del agujero negro. Por ejemplo, hay modelos que permiten estimar el diámetro y la simetría del anillo que se observa, hay otros parámetros que pueden inferir la masa del objeto, etc.”.   

De esta manera el trabajo desarrollado por su equipo en el Perimeter Institute permitió que los modelos de otras personas que colaboraban desde otras instituciones pudieran conectarse con facilidad a sus algoritmos para ser evaluados. 

“La colaboración tuvo ese beneficio, se comenzaron a encontrar formas de no realizar los esfuerzos de forma aislada, sino de hacerlo de manera conjunta, y encontrando esos comunes denominadores en los modelos fue que construimos algo más robusto que recibe esa información y la compara contra las observaciones. Es ahí donde yo invertí la mayor parte de mi esfuerzo y es gracias a todos esos modelos y algoritmos que es posible estimar parámetros de lo que se observa”.  

Entre lo destacado que representa este descubrimiento, el investigador egresado de la UG, enfatiza: “Se trata a su vez de un ejemplo de cómo avanza la ciencia pues trabajos previos ya predecían la existencia de un agujero negro en el centro de la Vía Láctea, y lo que se logró a través de esta colaboración fue la obtención de evidencia directa de la existencia de dicho agujero negro y una confirmación más de la validez de la Teoría de la Relatividad de Einstein con un gran nivel de precisión”, destaca. 

Por Juan Ma J