*No es bienvenida aquí, afirman habitantes

La visita realizada por la candidata aliancista a la alcaldía de la capital, Samantha Smith Gutiérrez a la ex Hacienda de Santa Teresa fue aprovechada por las personas que habitan en esta zona para recordarle que hace algunas semanas decenas de propietarios de automóviles fueron infraccionados ilegalmente por dejar afuera de sus viviendas sus vehículos.

Al recorrer casa por casa, la panista recibió críticas de los habitantes y en algunos de los casos, hasta no le abrieron la puerta, pese a la insistencia de tocar tanto el timbre como los portones, que inclusive llegó a molestar a varias ciudadanas.

Hay que recordar que la administración del panista Alejandro Navarro Saldaña comenzó hace varios meses a incrementar los operativos en colonias y fraccionamientos de la zona sur y del norponiente del municipio para aplicar multas a todo aquél automóvil o camioneta, con un fin recaudatorio.

A este medio de comunicación, algunos elementos de tránsito municipal o policía vial como se le denomina oficialmente, informaron que eran instrucciones de su director aplicar las multas de todo aquél vehículo que encontraban estacionados debidamente en las calles.

Y es que el argumento era que no está permitido dejar aparcados en el arroyo vehicular las unidades, y otro de los pretextos para infraccionar es que “fue una queja presentada por el presidente del comité de colonos”, cuando en varias calles, por ejemplo, de Ex Hacienda de Santa Teresa, no existe dicho comité.

En el recorrido hecho la noche del sábado por esta zona, tanto Samantha como su equipo de campaña recibieron las quejas de que su esposo solamente se dedica a aplicar sanciones “con fines recaudatorios”.

La candidata aliancista no tuvo contestación efectiva a los vecinos que manifestaron su enojo y prefirió retirarse del lugar.

La aspirante a la silla municipal inició su recorrido por la colonia de las Teresas y posteriormente en la Ex Hacienda de Santa Teresa. En varias casas donde no se encontraban o no les abrían la puerta, los militantes azules lanzaban sus trípticos promocionales, que fueron desechados por los propietarios de los hogares.

Por Juan Ma J