*Se da dentro de espacios universitarios
*“Hay que pacificar las universidades con perspectivas de género”
La violencia contra las mujeres y las niñas es una de las violaciones a los derechos humanos más extendidas y generalizadas del mundo. Según la Organización de las Naciones Unidas, se calcula que, a nivel global, 736 millones de mujeres -casi una de cada tres- han sido víctimas de violencia física y o sexual al menos una vez en su vida.
Por lo que, el 25 de noviembre (25N) tiene como antecedente honrar la memoria de las hermanas Mirabal, tres activistas políticas de la República Dominicana que fueron asesinadas durante la dictadura de Rafael Trujillo.
En el marco de esta conmemoración, en la Universidad de Guanajuato (UG) se llevó a cabo la conferencia magistral: “Claves feministas para el poderío y la autonomía de las mujeres en los espacios universitarios”, impartida por Marcela Lagarde y de los Ríos, referente feminista en México y Latinoamérica.
El acto protocolario fue encabezado por Claudia Susana Gómez López, Rectora General de la Universidad de Guanajuato (UG), quien, al dar la bienvenida a la activista feminista acentuó que dicha actividad constituye un espacio propicio para la transformación que como Universidad se busca para contribuir a la erradicación de la violencia: “Mirarnos, reflexionarnos y hacer el gran cambio”.
Externó la necesidad por “despertar el autoconocimiento, la reflexión sobre quiénes somos, quiénes podemos llegar a ser, cómo podemos lograrlo, qué y cómo deseamos amar a las mujeres”, cuestiones que consideró centrales para la vida en sociedad.
Entre los aspectos claves abordados por Marcela Lagarde y de los Ríos se encuentra la independencia, la autonomía y la libertad en las mujeres.
“La violencia contra las mujeres se asienta donde las mujeres no tienen oportunidad, no tienen independencia. Son dependientes incluso de sus agresores. Ese vínculo terrible hace más vulnerables a las mujeres, las pone en riesgo y por eso las cifras brutales de feminicidios que hay en este país. Para que las mujeres no dependamos de quien nos hace daño requerimos independencia económica, requerimos independencia mental, independencia de criterio, de pensamiento, de afectos”, señaló quien fue legisladora e impulsora de la Ley de acceso de las mujeres a una vida libre de violencia en el país.
Dentro de los espacios universitarios, Lagarde nombró al acoso intelectual como otra de las violencias que son ejercidas y que forma parte de los múltiples mecanismos de exclusión y desvalorización de las universitarias:
“Estoy acostumbrada a ver que en universidades muy honrosas en las que he trabajado, se dan fenómenos como de plagio a mujeres a través de los equipos anómalos en que nos insertamos, pero resulta que es el jefe el que firma, el jefe el que pone en su currículum la actividad que hacemos… en las intelectuales como nosotras el acoso es también ideológico y político”, expuso.
Ante el cuestionamiento de claves efectivas que permitan erradicar la violencia en espacios cargados estructuralmente de violencia, la también académica enfatizó sobre la apertura de espacios que permitan activar comités por la igualdad y la paz en los territorios universitarios:
“Que autonomía nos signifique territorio a pacificar, (…) sí hay que pacificar las Universidades con una perspectiva de género. (…) Hay que nombrar a los violentos, tenemos que estar vigilantes, dar seguimiento a los casos, pero el solo hecho de manifestarnos ya es un hecho político y hacerlo en nuestra Casa de Estudios lo dignifica”, dijo Marcela Lagarde.
Asimismo, la etnóloga tomó como referencia particular la vida universitaria de la UG, la cual es dirigida por una mujer, recalcando el mensaje social que implica.
La conferencia cerró con una ronda de preguntas y la entrega de un reconocimiento a la doctora Lagarde, quien -se espera-, regresará a la UG en los primeros meses del próximo año.